Hace apenas tres semanas, el hockey argentino explotaba de orgullo al ver a Las Leonas colgarse la medalla de plata, la de mayor valor que la delegación nacional se trajo de los Juegos Olímpicos de Tokio. Hoy, en cambio, explota de indignación por los errores dirigenciales que terminaron costándole a las Leoncitas la posibilidad de jugar el Panamericano Junior para el que venían preparándose durante los últimos tres años y cargando sobre la espalda de un equipo alternativo y armado de apuro la presión de obtener la clasificación. Algo que al final, no sucedió: tras empatar sin goles con Uruguay el lunes, el seleccionado femenino cayó ayer a manos de Canadá por 1-0 y quedó fuera de las semifinales, paso necesario para aspirar a una de las tres plazas que había en juego. Tratándose de un torneo con solo seis seleccionados, y siendo Argentina potencia del continente y actual campeón del mundo, resulta increíble que las Leoncitas no vayan a poder defender el título obtenido en 2016 en el Mundial Junior femenino que se jugará a fin de año en Sudáfrica. Su próxima oportunidad será en 2023, en Chile, habida cuenta que a partir de ahora los Mundiales juveniles se disputarán cada dos años.
Ahora, a las dirigidas en esta ocasión por Rolando Rivero sólo les queda jugar por el quinto puesto contra Trinidad y Tobago, mañana al mediodía.
Los hechos
Recapitulando: Argentina no pudo competir con sus seleccionados Sub 21 titulares porque estos se vieron impedidos de ingresar a Chile luego de que se detectara un caso positivo de covid en un jugador que fue incluido en la lista pese a que días antes había estado en contacto estrecho con otros dos jugadores contagiados.
Dado que ambos planteles viajaban en el mismo micro, toda la delegación se vio obligada a regresar al punto de partida, en Mendoza, para hacer el aislamiento correspondiente en un hotel. Dirigentes de la Confederación Argentina (CAH) se movieron rápidamente para tratar de solucionar el problema. La única forma de evitar la ausencia de Argentina en el Panamericano (para el que faltaban pocos días) era enviar seleccionados alternativos, que fueron conformados con jugadores y jugadoras de reserva y otros convocados de emergencia. El femenino, de hecho, fue prácticamente el seleccionado provincial de Mendoza con la camiseta argentina. Una enorme presión para las cuyanas, que dejaron todo pero no pudieron lograr la clasificación.
Críticas
Toda esta cadena de errores en la logística, que frustró un proceso de tres años, generó una ola de críticas contra la Confederación Argentina (CAH) y la forma en la que viene manejándose en los últimos años. “No encuentro palabras para describir los sentimientos que tengo en este momento. No toquen a una sola jugadora, ¿eh? Que la culpa viene bien de arriba. Incapacidad dirigencial absoluta. Les rompieron todos los sueños”, reclamó la ex goleadora de las Leonas, Vanina Oneto, en su cuenta de Twitter.
Otra ex Leona, Silvina D’Elía, ya se había despachado contra la CAH el día anterior. “Los dos equipos argentinos se pierden de ir al Panamericano por una mala gestion de la CAH nuevamente. No es el presidente actual, ni el anterior, ni el anterior, es de hace tiempo y en todo. Si, no gusta que se sepa, pero de una vez por todas esto tiene que cambiar”, criticó la mendocina. Aníbal Fernández, presidente de la CAH, recogió el guante en una entrevista con el diario MDZ, de Mendoza, en la que argumentó que los planteles viajaron en micro desde Mendoza porque no había vuelos disponibles desde Buenos Aires y que se usó una misma unidad “porque venían de estar en una cápsula y todos los PCR dieron negativos en Argentina”.
Dos pasos más
Luego de su triunfo sobre EE.UU. en el debut, los Leoncitos jugarán hoy a la siesta contra Trinidad y Tobago, por el pase a semifinales. En caso de ganar, se enfrentarán a Canadá, segundo mejor clasificado de la Zona B.